Diego Cabello Consiguió en Pamplona su tercer título
consecutivo de campeón de España absoluto. Y sin comer. Y es que una
inoportuna gastroenteritis a punto estuvo de arruinarle la cita más
importante de la temporada. El campurriano saltó a la pista con el
estómago vacío, pero centrado en hacer su carrera ante el poderío de los
tres 'Javieres', Sagredo, Carrión y Cartagena, y sobre todo de Nacho
Sarmiento. Su gran rival.
Desde la primera valla impuso un ritmo de zancada
imposible para los otros siente invitados a la final. Además, uno de
ellos, el propio Javier Sagredo, internacional este año en el Europeo de
Helsinki, abandonó lesionado tras superar la tercera valla. Las cosas
se ponían más de cara aún para el campurriano, que afrontó los últimos
cien metros con varios cuerpos de ventaja con respecto a Sarmiento y
Carrión. Al final, victoria y gran crono de 50.61 segundos para el
atleta del Playas de Castellón, que se quedó a sólo trece centésimas de
mejorar su propio récord de Cantabria de los 400 vallas (50.48).
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